Diego Rodríguez (3.5): En el primer tiempo tuvo una buena tapada en una contra (a pesar de dejar muy descubierto el primer palo) y una floja salida queriendo rechazar con los pies que por suerte no hubo que lamentarla. En el segundo nada que hacer en el gol ni en el bombazo en el travesaño. Flojo en los saques, no se entiende muchas veces por qué tarda ganando por un gol en el Libertadores en vez de buscar rápido una contra. Gabriel Vallés (4): Tuvo un partido correcto, hoy no se complicó nunca. En el primer tiempo probó al arco y la tiró muy lejos. Sin hacer mucho trató de ser salida por derecha. Unión atacó más por la otra punta (el siete jugó muy bien), quizás eso lo benefició. Cristian Tula (4): En el primer tiempo tuvo problemas otra vez con algunos pelotazos, errando en el cálculo como en el partido anterior, después mejoró. En el complemento rechazó en varias pelotas paradas en contra, uno de los karmas de este equipo. Ahí es quizás donde más se note su vuelta a la titularidad. Julián Velázquez (3): No tuvo errores groseros quizás, pero sigue muy lejos de brindar seguridad y más aún de ser el que prometía. Erra el cruce en el empate. Federico Mancuello (3): Las ganas de siempre, pero no alcanza. Flojo en defensa (en el gol lo pasan muy fácil) y totalmente improductivo en ataque. Su único aporte ofensivo fue un tiro libre indirecto que Islas controló en dos tiempos. Franco Razzotti (2): Pésimo partido del volante, homenajeando a Battión. Lentísimo, siempre llegó tarde y perdió la espalda. Encima, a pesar de ser grandote, no ganó ni siquiera de arriba. Martín Zapata (3.5): Ni fu ni fa decía mi abuela (nunca supe el significado real de la frase, pero se entiende), así fue el partido del petiso. Condicionado de entrada (lo amonestaron a los 15'), no tuvo un partido tan malo como Razzotti, pero estuvo lejos de mostrar desequilibrio y/o convertirse en el motor del equipo. Tuvo una buena jugada sobre el final que remató de zurda muy por arriba (como casi siempre). Juan Manuel Trejo (1): Otro muy mal partido del pibe, sin entrega ni ideas, distraído, livianito. Con la jugada del empate pidió a gritos que lo saquen. Lo único positivo fue el pelotazo a Menéndez que derivó en el penal. Su titularidad ya es insostenible. Matías Pisano (2.5): El sábado hizo algo de magia; hoy, nada por aquí, nada por allá. Casi no participó del juego y ahí está la mayor explicación a la hora de saber por qué Independiente jugó tan mal. Dos córners mal pateados terminaron uno en gol y el otro en una contra muy peligrosa. Daniel Montenegro (4): Hoy volvió a sufrir la falta de compañía a la hora de general volumen de juego y lo sintió. Cuando obligatoriamente todo tiene que pasar por él es cuando menos espacios tiene y por ende menos rinde. Buena habilitación a Menéndez en el primer tiempo y una que se fue por arriba en el complemento. Párrafo aparte para el penal; es imposible saber lo que hubiera pasado si Islas no se adelantaba, pero es como mínimo riesgoso que casi siempre le pegue al mismo palo. Con el segundo intento sigue siendo el goleador del equipo. Cristian Menéndez (4): En el primer tiempo ganó varias veces de arriba y bajando de pecho pelotazos, pero luego o no tenía receptores o le costaba controlarla. En el mano a mano no define mal, hay mérito del arquero, después le cometen el penal. En el complemento a Boris se lo comió Correa y le ganó casi siempre. Leonel Miranda (3): Entró por Trejo y jugó más de media hora cumpliendo una floja tarea. Lo amonestaron y no logró imponer su gambeta salvo en una ocasión, por derecha, aunque luego mandó mal el centro. Adrián Fernández (3.5): Entró promediando el complemento por Pisano y a pesar de no cumplir una buena actuación y no resolver bien algunas jugadas que parecían favorables mostró muchas ganas, siendo el juvenil con más actitud de los que estuvieron en la cancha. Por lo hecho en el semestre pasado merece más oportunidades. Francisco Pizzini: Muy pocos minutos como para ser evaluado. Omar De Felippe: Teníamos la chance de ganar por tercera vez como local y quedar muy cerca de los puestos de ascenso y dimos un paso atrás, no solo por no lograr el triunfo y quedar a cinco del tercero, sino también por haber sido superado en juego por el adversario. Se perdió el medio todo el partido, siendo lo de Trejo y Razzotti más que preocupante. El equipo fue muy flojo, salió dormido al segundo tiempo y volvió a mostrar desacoples defensivos en las pelotas paradas a favor. No puede ser que muchos de los córners o tiros libres que tenemos terminen en jugadas de riesgo para el rival.