La Perla de Oro: Emiliano Rigoni: Buen partido del ex Belgrano. Sin dudas, el mejor desde su llegada al club. Si bien perdió en ocasiones con los defensores sabaleros, se las arregló bastante bien para generar peligro sobre todo por el sector izquierdo donde tuvo buenas asociaciones con Tagliafico. Mostró toda su capacidad para hacerse cargo de las pelotas paradas, aprovechando su facilidad de pegarle al balón con ambas piernas. De hecho, casi convierte, en dos oportunidades, desde el tiro de esquina. Sobre el final, luego de una contra comandada por Benítez, marcó el cuarto gol del encuentro para redondear la goleada.   La Perla de Plata: Víctor Cuesta: Otro que tuvo un buen rendimiento. Luego del descuento de Colón, donde el equipo se retrasó innecesariamente, fue el más destacado de la defensa. Fue prácticamente impasable para los delanteros rivales. Tuvo grandes anticipos donde se generaban salidas rápidas que no fueron aprovechadas sino hasta el final del partido. Faltando poco para el término del encuentro pudo marcar el tercer tanto para liquidarlo y llevar tranquilidad a todo Independiente. Bien por el ex zaguero de Arsenal   La Perla de Bronce: Diego Vera: Si bien no pudo convertir fue importante para crear espacios y generar peligro para la defensa rival. Luego de una gran maniobra individual suya, Denis pudo abrir el marcador a los 11 minutos de iniciado el juego y se llevó toda la ovación de la gente. Se movió por todo el frente de ataque y obligó, como siempre, a los defensores para que no salieran con comodidad. Bien por Viruta Germán Denis: Tuvo un arranque electrizante, anoche, en el LDA. De no haber sido por las intervenciones del arquero Brown, hubiera marcado más de un gol. Se entendió bien con el uruguayo Vera y pudo volver a convertir luego de una linda jugada de Viruta. Pivoteó y aguató bien la pelota de espaldas al arco. En el complemento, se fue reemplazado por el Cebolla y se lo notó fastidioso por su salida, dejando en claro que tiene que jugar siempre.   La Perla Negra: Hernán Pellerano: Cuando sobresale en su juego, es notorio su rendimiento. De igual manera sucede cuado las cosas no le salen del todo bien. Perdió más de lo que ganó y quedó expuesto en varias ocasiones, sobre todo en el complemento donde su compañero de zaga le salvaba las papas. Independiente sufrió mucho en defensa y uno de los principales responsables fue su primer marcador central que no tuvo una buena noche.   A considerar: Independiente goleó 4-1 a Colón de Santa Fe pero no jugó para nada bien. Luego del gol de la visita, el local regaló pelota y campo apostando solamente a una contra para liquidar el partido. Se sufrió más de la cuenta y el resultado no refleja en absoluto lo que sucedió en el campo de juego. El conjunto de Pellegrino mejoró en varios aspectos, en particular en la actitud que tuvo los primeros 22 minutos del partido y pudo aprovechar las pelotas paradas a favor. Sin embargo, cuando el rival descontó se retasó y dejó de atacar despreciando totalmente la pelota. Se golpeó en los momentos justos y se ganó un partido sin jugar del todo bien. Ojalá que el triunfo frente al Sabalero sirva como despegue de una vez por todas.