Independiente igualó 2 a 2 ante Barracas Central por la novena fecha de la Copa de la Liga Profesional en un partido en el que fue claramente perjudicado por Pablo Dóvalo, árbitro del partido y por el Lobo Medina, desde el VAR.

El equipo de Carlos Tevez arrancó mejor que su rival, sin evidenciar una clara superioridad, empujaba a su rival. Matías Giménez, quien volvió a ser titular esta noche, aprovechó un error en la salida y anotó el 1 a 0 parcial con un golazo espectacular. Le pegó con el pie abierto, a su estilo, y la clavó en el ángulo.

Luego, vino la jugada de la polémica, cuando Alexis Domínguez le metió un planchazo criminal a Iván Marcone. Pablo Dóvalo sancionó y solo le puso amarilla, mientras que el VAR jamás intervino. Esta jugada torcería el rumbo del partido porque el equipo se quedó con esa jugada. Barracas lo aprovechó porque además de jugar con el beneficio de tener a sus 11 futbolistas en cancha, se envalentonó y con un golazo de tiro libre de Siro Rosane igualó el partido, que luego desniveló, sobre el final del primer tiempo, el propio Domínguez.

En el complemento al Rojo le costaba arrinconar a su rival hasta que Tevez tiró las bestias y puso a Gabriel Ávalos y Federico Mancuello en cancha. El propio Mancu tiró un centro muy bueno para el empate de Giménez con un certero cabezazo.

Al Rojo le quedaron 25 minutos donde fue superior pero no pudo demostrarlo en situaciones de gol. Daba la sensación de que si Independiente aceleraba lo ganaba. Sobre el final del partido, se discutió una evidente mano adentro del área de. Barracas que por supuesto no fue ni cobrada ni revisada.

Fue 2 a 2 final. Un resultado con gusto a poco teniendo en cuenta que ahora se viene River pero que en la circunstancia en la que se dio puede llegar a ser positivo.