El Uno x uno es la nota en donde Orgullo Rojo califica y analiza la actuación de cada jugador, de manera individual en todos los encuentros. Recordamos que reciben puntos, aquellos que disputan más de 20 minutos de un partido.

Y cuando ponemos todos los puntajes del año juntos, obtenemos herramientas para analizar con fundamentos lo acontecido en este 2025, que amagó a ser muy bueno y terminó siendo todo lo contrario.

Independiente llegó a las semifinales del Apertura, y estuvo a un penal de llegar a una final ante Platense, en la chance más grande de campeonar desde el 2002.

Lamentablemente, no solo no se aprovechó, sino que en el Clausura, cuando todos esperábamos repetir lo realizado, nos chocamos contra una pared.

El Clausura fue horrible, y si bien tras el cambio de entrenador se consiguieron una serie de triunfos al hilo, no alcanzó para clasificar a nada, ni redondear un balance positivo.

A la hora de explicar ese rotundo cambio entre un torneo y otro, hay muchos imponderables y una certeza. Si bien el equipo de Vaccari nunca fue una maravilla y de visitante jugaba mal, tenía solidez en Avellaneda, donde llegó al año invicto, y con algunas buenas actuaciones. Pero todo se derrumbó como un castillo de naipes.

Tanto el DT como los dirigentes, que venían de dos grandes mercados de pases, en los que levantaron el nivel del plantel, pifiaron a mitad de año.

Por imponderables, como el flojo desempeño de refuerzos que no estuvieron a la altura de las expectativas.

Pero también por un grave error, que se pagó carísimo.

Independiente cambió al jugador más ganador que tenía, por uno que no tenía ganas de vestir la camiseta del Rey de Copas.

Álvaro Angulo jugó 20 partidos en Independiente, y en otros cuatro disputó menos de 20 minutos. Ya en la tercera fecha se ganó un lugar indiscutidamente, y solo se perdió tres jornadas en el semestre.

Metió seis goles en el club, aunque le contaron cinco, ya que el que le hizo a Platense lo declararon como en contra.

Además del mencionado le marcó a Gimnasia de La Plata, Instituto y Gimnasia de Mendoza, en el último partido que jugó, ya en el segundo semestre por Copa Argentina.

Mención aparte para los dos que faltan, que no son casualidad. La Pantera igualó el clásico ante Racing, siendo la figura del derby, recibiendo 9 puntos, puntaje casi perfecto.

Esta fue la calificación de Orgullo Rojo. Álvaro Angulo (9): Partidazo del Negro, que entendió desde el minuto cero como se juega un clásico. Al revés de Vera, apenas iniciado desbordó metiendo con todo, mostrando una actitud que no tuvieron sus compañeros. A los 44 hizo un jugadón para llegar al fondo y mandar centro para Ávalos. En el complemento a los 63 llegó bien al fondo, tocando hacia Montiel, a quien seis más tarde habilitó de gran manera. Es el que siempre hizo parar a la platea, yendo para adelante dando todo. Por eso merecía empatar, y lo hizo, picando ante un pase no esperable, y llegando antes que el arquero metiendo hasta el alma en ese cabezazo. Si faltaba algo para confirmar su titularidad, ya está.

El otro, fue nada menos que ante Boca, para dejar afuera al Xeneixe en los cuartos de final, el triunfo más resonante de los últimos años. Al ser consultado en la semana sobre una sequía goleadora, el defensor declaró que se lo estaba guardando para la Bombonera. Fue e hizo el gol del triunfo.

Orgullo Rojo lo calificó de esta manera. Álvaro Angulo (7.5): Cometió un error grosero, dejando habilitado a Merentiel a los 37 y perdió un par de veces en la primera parte. Pero obviamente eso deja de importar, porque en el complemento desfiló por la banda. Dijo que iba a hacer un gol en la Bombonera, y metió uno que vamos a recordar siempre. Gracias Negro.

Además de estos puntajes, recibió un 8 ante Godoy Cruz, y seis veces obtuvo 7 puntos. Quedó con 6.5 de promedio, el más alto del plantel en todo el 2025.

No se puede dejar ir a un jugador así, pero lamentablemente poco tiempo después, peleado con los dirigentes, se fue del club.

Todavía lo estamos extrañando, siendo un gran error su partida.