Diego Rodríguez (4.5): Nuevamente tiene un error grosero tocando con la mano la pelota fuera del área, dándole a Belgrano un tiro libre muy peligroso. Tapa un tiro fuerte de Márquez y si bien salió correctamente con los puños en algunos centros se queda en la jugada que salva Vera en el área chica. Gustavo Toledo (5.5): Correcto lo del lateral, con algunos errores pero ganando más de lo que perdió. Comete un error que pudo terminar en gol de "pavota". Cristian Pellerano (7): Otro muy buen partido del central, con un error que por suerte no pasó a mayores. Tuvo una chance en una pelota parada, pero le pegó mal de zurda. Fue el que ligó amarilla en el tumulto del primer tiempo y le salvó varios errores a sus compañeros de línea. Siempre gana y sale jugando bien, una garantía el dos de Independiente. Víctor Cuesta (4): En el día de su cumpleaños él hizo el regalo y permitió la apertura del marcador. Luego tuvo otro error al no poder rechazar una pelota que le pasa entre las piernas. Luego levantó su nivel, más cercano a lo que muestra siempre, pero esos errores lo condicionan a la hora de puntuar. Nicolás Tagliafico (6): Flojo primer tiempo, con varios pases afuera y mal dados. En el complemento fue el Pitbull que conocemos, firme y fuerte en la marca, salvó bien en la jugada del error de Pellerano y casi hace un golazo de afuera del área. Jorge Ortíz (6): Buen partido, aunque más por el juego que por la marca, ya que perdió el medio en varios momentos con Farré y Prediger. Mete un gran centro de zurda en el empate. Tuvo el segundo pero su bombazo terminó en una gran tapada de Olave. En el segundo tiempo redondeó la buena actuación manejando los tiempos. Jesús Méndez (5): Al igual que el Marciano, si bien participó en el circuito de juego, falló en la recuperación. Además no se destacó tanto con la pelota a pesar de su calidad, cometiendo varios errores y perdiendo la espalda con Zelarrayán varias veces. Igual su piso es el techo de Vitale. Recibe una amarilla injusta y una roja insólita. Federico Mancuello (4): Encima que viene disminuido físicamente, un golpe empeoró la situación y lo hizo salir a los 37. Ya ni siquiera podía arrancar en velocidad. Cristian Rodríguez (6): No fue la figura, ni siquiera se destacó, pero con algunas apariciones es suficiente para desnivelar. Como lo comentado anteriomente en el caso de Méndez, un partido flojo suyo es uno consagratorio para por ejemplo Aquino. Se come un gol tremendo a los 68 luego de un rebote de Olave, mete un taco hermoso para Vera y convierte el cuarto en medio de un flipper. Jugó casi de nueve durante buena parte del encuentro. Es muy bueno tenerlo y que haya podido jugar casi todo el partido. Martín Benítez (8): Volvió a destacarse por izquierda, siendo por momentos imparable para Barrios y participando en casi todos los goles. Tuvo un mano a mano que le sacan en la línea y un gran desborde por izquierda antes de la bomba del Marciano. ¿A quién carajo le importa si mandó el centro en el segundo gol? Inmediatamente después lo tuvo de derecha en la que luego erra el Cebolla. Diego Vera (8.5): Sabe tanto que parece un monje que hizo un curso de delantero en el Tíbet, le falta jugar con túnica. Ya al minuto se mostró enchufado haciendo una gran jugada por derecha. Gran pared con Benítez en el mano a mano del Misionero. Convierte el empate aprovechando el rebote de Olave luego de un cabezazo flojo suyo. Tiene una tremenda salvada en el área chica, subsanando un error al no despejar antes en la misma jugada. Mete el tercero dejando en ridículo a Olave, que quedó tirado en el piso, algo que le gusta hacer seguido al pariente de Rodrigo. Matías Pisano (6): Entró a los 37 por Mancuello y luego de unos minutos de intermitencia entró y bien en juego por derecha, siendo ya su segundo partido levantando el nivel. Torito Rodríguez: Reemplazó al Marciano y se lo vio mucho mejor que en su vuelta, algo que me pone muy contento y lo posiciona como posible titular en la primera final. Juan M. Lucero: Saltó a la cancha sobre el final y tuvo buenas intervenciones. Mauricio Pellegrino: Con el once casi ideal, se consiguió un resultado ídem. Independiente se repuso a un error que permitió a un equipo como Belgrano ponerse en ventaja y en vez de llenarnos de interrogantes se dio vuelta el partido con buen fútbol. Luego de ponerse en ventaja, el Rojo fue contundente y se terminó floreando.  Otra vez queda demostrada la enorme diferencia entre titulares y suplentes, aunque hoy a favor. Cuando el equipo está completo entra Pisano y rinde por ejemplo, o sale Ortíz y entra el Torito. Es una lástima no haberlos tenido a todos para la llave ante Santa Fé. Pero justamente esto último es lo que sobra viendo jugar a Independiente en este nivel. No solamente pensando en la final de la liguilla, sino pensando en el año que viene, ya que pase lo que pase ya tenemos la participación en una copa asegurada.