Rodrigo Rey (5): En el primer tiempo, controla a los 18 abajo un tiro de Botta. En el complemento no tuvo mayores intervenciones, pero si jugar mucho con los píes. Redondeó un gran certamen, siendo uno de los pocos puestos cubiertos en el once titular.

Mauricio Isla (5): Cumplió como siempre. A los 10 manda un buen centro al segundo palo a Spörle. Más allá de algunos errores, fue el único que no tenía miedo de tener la pelota. Gran torneo de uno de los pocos jugadores confiables que tiene este plantel.

Juan Fedorco (3): Venía teniendo un partido aceptable hasta el descuento. A partir de ahí fue una bola de nervios y de imprecisiones.

Joaquín Laso (2): Mal partido del central que ya estaba nervioso antes de la debacle. Varios errores como a los 53 con Botta. Solo puedo alejarse del desconcierto en una jugada, cuando Herrera le saco un tiro abajo.

Ayrton Costa (5): El compromiso de siempre para marcar, con alguna participación adelante. Llega a los 26 al fondo, en una chance clara. Estuvo al borde de la roja y el DT tardó mucho en sacarlo.

Adrián Spörle (5): Aceptable, a pesar de las limitaciones que ya sabiamos que tenia. A los 10 va al fondo y llega a conectar hacia el medio un centro de Isla. En un contexto similar abre el marcador con un cabezazo abajo. A los 46 tuvo el tercero y lo cerraron justo.

David Martínez (4.5): Buena primer etapa mostrando cada vez mas participación. Sobre el final del primer tiempo la bajó en el área y le dio de zurda, provocando el penal para el segundo. Se fue perdiendo en el pánico generalizado.

Iván Marcone (4.5): Tenía un encuentro tranquilo, sin destacarse ni tampoco con errores, hasta que salió reemplazado promediando el complemento. Es inentendible que haya salido el capitán del equipo en un momento tan crucial, en un cambio puesto por puesto.

Lucas González (2): Aceptable primer tiempo, como la mayoría y nefasto complemento. Se notó que le pesó mucho el contexto y no entendió la situación como cuando se quedo tirado dos minutos sin tener nada. Tuvo un tiro libre a los 25 que pasó cerca. Manda el centro en el gol de Spörle.

Alexis Canelo (2): Mete el segundo rematando fuerte el penal en lo único bueno que hizo, aparte de un centro para Spörle a los 46. Le pesó una tonelada cada pelota que tocó post empate.

Gabriel Ávalos (1): Hoy colmó la paciencia de los hinchas, completando un torneo para el olvido. A los 10 le pifió bien posicionado. Cuatro más tarde, no le puede dar bien de cabeza en un córner. A los 26 también la agarró medio mordida cuando lo atoraron. Hoy no aportó ni siquiera ganando de arriba.

Alex Luna (2): Entró por Costa a los 55, no generó absolutamente nada, paralizado como el resto de sus compañeros.

Diego Tarzia (4): Reemplazó a González a los 67. Mostró actitud y ganas, pero no le alcanzó para traducirlo en llegadas de riesgo. A los 77 le quedó de palomita en el segundo palo. Terminó haciendo toda la banda izquierda ante la salida de Spörle.

Federico Mancuello (2): También a los 67, él por Marcone. En lugar de darle tranquilidad al equipo lo hizo más lento.

Ignacio Puch: Ingresó a los 80 por Spörle. Tuvo el triunfo dos veces sobre el final y Herrera lo evitó.

Carlos Tévez: No hay mucho para decir, debe dejar de ser hoy mismo el técnico de Independiente.

Claramente no es el culpable de la situación en la que está el club. Tampoco es el principal responsable del empate de hoy, porque es casi toda de los jugadores.

Pero no hay ninguna razón para que mantenga su cargo, después del nivel mostrado por su equipo en el torneo, sin cumplir el objetivo trasado y sin mérito alguno para obtenerlo.

Además es la cara visible de este papelón, en el podio de los peores junto a Patronato 2014 y el clásico que perdimos con nueve.

Teniendo en cuenta el partido con Riestra, y el de hoy, sería faltarle el respeto al club que no deje su puesto.

Esta noche el plantel tenía todo para cambiar el rumbo, y entrar a los cuartos de final con una goleada, ganando confianza. Pero transformaron un contexto ideal, con dos goles y un jugador de más, en una vergüenza histórica, ante un equipo diezmado y cansado.

Hoy quedaron afuera como lo cagones que demostraron ser durante todo el año, sobre todo en el clásico y ante Riestra, Basta.

Y para ustedes dirigentes, máximos culpables de la situación del club, más aquellos que estuvieron con Moyano. Si no se les ocurre otra cosa, que volver a bolsiquear al socio, váyanse también.