conformismo barato jamas
conformismo barato jamas
Conformismo barato, jamás
28/06/2017
Por: Alexis Potel
28 de junio de 2017
Una nueva desilusión nos propició otro cachetazo en la mejilla, que tan roja como la camiseta de Independiente está de tantos que hemos recibido en los últimos años. La entrega de este último semestre, las grandes apariciones como Ezequiel Barco, Fabricio Bustos y hasta el propio Martín Campaña que terminó siendo el mejor refuerzo de años anteriores, quedaron opacadas por este presente negro que la entidad de Avellaneda transita sin haber podido, por el momento, ingresar a la Copa Libertadores 2018.
Las esperanzas, que terminaron de diluirse como agua entre los dedos ante Lanús en el empate 1-1, comenzaron a mostrar la inestabilidad desde el inicio de la segunda mitad del campeonato local, donde el Rojo cosechó 12 puntos de 24 jugando en terreno propio. Tal vez, en el análisis a flor de piel, con algarabía y bronca podremos lamentar aquellos empates como por ejemplo: San Martín de San Juan (0-0), con el peor Vélez de los últimos años (1-1), con Atlético Rafaela quien jugará en la B Nacional la próxima temporada(1-1) y con Olimpo (1-1) que el lunes consiguió mantener la categoría tras un contundente 3-0 en Mar de Plata ante Aldosivi, equipo que también terminó descendiendo y que Independiente no pudo casi generarle peligro cuando viajó a la Feliz (0-0).
Es cierto que desde la llegada de Ariel Holan se vislumbraron mejoras y se definió una clara idea de juego forjada a partir de mantener la pelota por el césped e intentando ser protagonista siempre, pero el conformismo barato nunca fue un lema característico de una entidad plagada de historia, hazañas y gloria. "El aliento de la gente puede ser contraproducente", analizó 48 horas antes del encuentro con el "Granate" el recordado "Chivo" Pavoni y como casi todo el campeonato, Independiente ante su gente fue una máquina de fallar situaciones de gol. Algo similar al cotejo de 2013 ante Boca donde el Rojo creó infinidades de ocasiones y terminó igualando 1-1 con el colombiano Caicedo como estandarte de esos errores.
La expresión de "conformismo barato, jamás" no deja exento a los dirigentes. Pese a que no se consiguió el objetivo por la vía de los primeros cinco lugares del torneo local, las incorporaciones de cara al siguiente semestre deben ser de jerarquía y sembrar las bases desde lo construido. Traer refuerzos de calidad, no para rellenar, es tan vital como mantener futbolistas sin tener que vender para saciar el bolsillo de nadie. Independiente ante todo.