Matías Pisano, sin ser descollante ni mucho menos, fue el único jugador de Independiente que estuvo a la altura del clásico que se jugaba.
El volante ofensivo del Rojo pidió la pelota en toda la noche, intento gambetear y remató al arco en dos ocasiones exigiendo a Sebastián Saja -una pegó en el palo- que le ganó el duelo personal.
Pisano complicó a los defensores de Racing durante todo el partido pero, solo, no pudo hacer nada para torcer el rumbo de un partido que estaba sentenciado desde el inicio.
Edicion Nº
1859 correspondiente al día
18/08/2025 |
Inscripto en la DNDA:
(en tramite) |
Propietario:
Propietario
Director:
Director
Domicilio Legal:
Dirección |
Tel:
Teléfono