Javier Cantero había declarado en los últimos días por radio y televisión que el oficialismo iba a evitar peleas mediáticas con la oposición. Horas más tarde presenta un comunicado que está muy lejos de pretender paz entre las partes. A esta altura, que estas cosas sucedan, no debería sorprendernos en lo más mínimo. Es la misma persona que aseguró, por ejemplo, que pagaría la convocatoria de acreedores en sus primeros días de gobierno y jamás lo hizo, que nunca iba a poner como excusa los mandatos anteriores ya que sabía con que se encontraría, o, por citar algo reciente, Insúa no iba a venir a Independiente y semanas después estaba firmando su contrato. Evidentemente el poder los enfermó. De un tiempo a esta parte sufren, paradoja cómica mediante, de delirios Místicos. No hacen otra cosa que victimizarse cuando también son culpables de la situación de Independiente. No tienen tacto. No tienen timing. Lejos quedó aquel slogan “el club es de los socios”. Si alguna vez les importó el socio fue solamente para ganar las elecciones de diciembre de 2011. La pelea es por ellos. No por Independiente, mucho menos por sus socios e hinchas. Son especialistas en poner cualquier nombre y apellido por encima del escudo y la camiseta. Y eso, señores, es imperdonable. Ambas partes son impresentables y se retroalimentan de su propio patetismo. Una parte no podría existir sin la otra. Cantero ganó las elecciones por todo lo que Independiente Místico enumera en su insólito comunicado y algunas cosas más también, que son ciertas, está claro. El socio ya lo sabía. Y lo sabe. No necesita que nadie se lo recuerde. Y la oposición huele sangre y acecha. Pero la sangre está, eso también es verdad. “El daño está hecho”, dijo Keblaitis sin siquiera amagar con su renuncia. Convengamos que fue IM quien se encargó, a través de sus incapacidades, pésimas decisiones, ineptitudes y demás cosas de sembrar el terreno para que la oposición pueda pensar en un adelantamiento de las elecciones. Y lo que es aún peor, que muchos de aquellos socios que en diciembre de 2011 los votaron llenos de esperanza y confianza, hoy apoyen la decisión de una salida anticipada de Cantero. Y con sobradas razones. Cuando se habla tanto del pasado, en cualquier ámbito de la vida, es porque hay un presente que no se quiere observar. Como socio y ciudadano estoy cansado de los gobiernos que todo lo explican por la dirigencia anterior. Hay muchas cosas de las cuales esta CD debe hacerse cargo. Para eso fueron elegidos. Sabían que Club agarraban. El pasado no puede ser la excusa y la defensa eterna. En su comunicado Independiente Místico se da el lujo de hablar de la cosecha de 15 puntos por parte de la anterior dirigencia cuando bajo el mandato de Javier Cantero en el Torneo Inicial 2012 se hicieron 17 puntos, que sumados a los 22 del Final son los que nos terminan condenando al histórico descenso. Se quemaron aquellos libros que decían que perder la categoría era producto de 3 años de malas campañas. Independiente descendió porque en la temporada más importante logró 39 puntos sobre 114 posibles. Algo que por lo menos, debería servirle a IM para no hablar ni escribir más de fútbol. Dieron sobradas muestras de no saber absolutamente nada al respecto. "Tuvimos una Comisión de fútbol nefasta que buscaba jugadores por internet" también dijo el Vicepresidente segundo. Eso, sumado a su casi nula capacidad de gestión, termina siendo un combo letal que explica el triste presente futbolístico. Hablan de millonadas en jugadores los que trajeron a Caicedo, los que están embargados por Defederico y a punto de perder puntos por Farías y Nuñez, este último comprado por la nefasta dirigencia anterior y dejado libre por la nefasta dirigencia actual, al igual que Gabbarini, Galeano, Godoy y Ontiveros (recientemente adquirido por el Galatasaray en aproximadamente 2 millones de euros). Hablan de honestidad los que prometieron que cada socio iba a estar al tanto de todos los movimientos de dinero del Club poniendo una clave en la web oficial, los que aumentaron el pasivo como mínimo en 80 millones de pesos, los que sufrieron muchísimas renuncias, algunas por negarse a firmar el balance, exactamente lo mismo que había pasado en gestiones anteriores. Hablan de obras cuando casi todo lo hecho hasta el momento fue gracias a socios que pusieron su profesión, su tiempo y hasta su dinero en beneficio del Club. Hablan de no querer llevar conflictos desde afuera al campo de juego, porque puede intranquilizar a los jugadores y perjudicarnos en la lucha por el ascenso cuando fue lo que hicieron durante todo el año en el que Independiente descendió. Todavía cuesta escribirlo, cuesta leerlo, Independiente descendió… Los que están en el gobierno y no renunciaron el 15 de junio. Algunos que estuvieron antes y pretenden volver a hacer daño. Todos nos mandaron a la B, todos son impresentables.