En las últimas horas lo que parecía un hecho se empezó a desmoronar casi de manera insólita. Independiente tenía acordado con Banfield la compra de sus dos laterales: Gustavo Toledo y Nicolás Tagliafico. Sin embargo, y a pesar de tener todo prácticamente cerrado con los jugadores, todo pende de un hilo. El Rojo primero fue a buscar a Toledo, sabiendo que la llegada de Tagliafico era más complicada. Sin embargo, tras llegar a un acuerdo por el lateral derecho, se incluyó en el combo al de la otra banda. Y en una cifra que superaba los 30 millones de pesos Banfield aceptó vender el 50% de Tagliafico y el 100% de Toledo. Sin embargo, los problemas aparecerían por otro lado: el 15% que le corresponde a los futbolistas ante cada traspaso. Y el problema reside en que ni Banfield ni Independiente quieren hacerse cargo del porcentaje de Tagliafico debido a que el jugador no es vendido en su totalidad. El Taladro aclaró que abonará ese monto cuando se realice el 100% del traspaso. Independiente podría pagar ese monto, pero considera que no le corresponde hacerlo. En el caso de Toledo todo es más claro, el jugador quiere jugar en Independiente y buscaría la forma de que se llegue a un acuerdo de alguna manera. Sin embargo, algunos dirigentes de Independiente, ofuscados por la situación quieren dar marcha atrás con toda la operación. "El arreglo era por los dos, o vienen o se caen ambos", comentan por lo bajo. ¿Será una presión para que Banfield se haga cargo del porcentaje? ¿Quién terminará cediendo? Pareciera extraño que una negociación de tanto dinero se caiga por un 15% pero en las novelas de los veranos, Independiente nunca termina con el final feliz. Habrá que esperar las próximas horas que serán decisivas para la definición de ambos casos. A todo esto, en 10 días empieza el torneo e Independiente no tiene lateral derecho. ¿Prevalecerá la lógica y vendrá Toledo al menos o el orgullo, que suele ser nacional, le impedirá a Independiente contar con el lateral del Taladro?