pensamientos laterales
Por: Javier Brizuela
19 de enero de 2022
Independiente está sumergido en una crisis económica desde hace ya varios mercados, eso no es ninguna novedad. Como también es cierto que debe reforzarse si es que quiere tratar de ser protagonista en el torneo que comienza el 12 de febrero.
Ahí es donde empieza la puja para determinar si conviene vender a tal jugador, para aliviar las finanzas, pero disminuir así la jerarquía del equipo. Y también por el otro lado, a quien y como conviene ir a buscar para reforzar el plantel, tratando de acrecentar las deudas lo menos posible. Pensando que si sale bien, un gasto termina siendo una inversión y generando un win win, pero si sale mal, bueno... sabemos perfectamente lo que pasa porque lo estamos padeciendo.
Esta paradoja nos obliga a analizar y opinar, porque con el diario del lunes cualquiera juega al PC Fútbol. En este caso vamos a enfocarnos en los laterales y pensar que le conviene a Independiente.
El puesto de número tres necesita un refuerzo de manera urgente, así lo confirman las actuaciones de Thomás Ortega. Ojalá el pibe pueda afianzarse lo antes posible, pero lamentablemente aún no mostró lo hecho en Reserva ni lo necesario como para quedarse tranquilo.
En este momento son dos las opciones que maneja el club. La de Elías Gómez de Argentinos y Milton Valenzuela, libre de la MLS. Si bien el tres del Bicho es de lo mejor del país en los últimos años y sería una gran incorporación en términos futbolísticos, el hecho es que desde La Paternal piden dos millones de dólares por él.
Desde mi punto de vista, Independiente no puede abonar de ninguna manera esa cifra, por más que la colecte desprendiéndose de Velasco. Me encanta Gómez, reitero que es de los mejores en su posición, pero sería recaer en los mismos errores que nos trajeron a esta situación. Valenzuela es una opción viable, es más joven, y también tiene poder de reventa. Y que su llegada no esté supeditada a la venta de Alan, tuerce la balanza, siempre y cuando hablemos de contratos similares.
Por el lado derecho, la cosa es mucho más clara. El plantel cuenta con un Gonzalo Asís que siempre dio garantías y hasta se puede pensar en la chance del Perrito Romero de ser necesario, más si Benavídez sigue en levantada. La opción de Vigo, ahora en River, está relacionada con la máxima complicación en este puesto, que obviamente es Fabricio Bustos.
El Tractor, de los mejores laterales del país, y uno de los más destacados jugadores salidos de Domínico en la última década, está en conflicto con los dirigentes. Y si bien tiene muchos motivos para estar enojado, parece empecinado en hacerle daño al club que lo formó como persona y profesional. Porque yéndose libre pasa eso, no perjudica a los Moyano, lastima a Independiente. Y recaer en Marcollese es equivocado, porque por más que sea un buitre, no puede decidir por el jugador y hablaría muy mal de Fabricio que sea asi. Ese representante es capaz de por ejemplo, dejar plantado al Presidente de Independiente en una oficina, esperando a un Piatti que en ese momento estaba firmando con San Lorenzo, pero hasta donde yo se, no tiene de esclavo al jugador.
Por más influenciado que esté, la decisión de pasar a River o no y quedar libre o renovar es del lateral, y eso puede ser lo que defina si Independiente se hace con dos millones de dólares aproximadamente (muy poco por él, mucho por el contexto en el que se da), o nada. Lo que si definen los dirigentes y Montenegro, es que hacer en el caso de que el profesional se plante y decida quedarse seis meses más en Avellaneda.
Ahora voy a volver a dar mi opinión y es la siguiente. Me duele muchísimo lo que pasa con Fabricio, porque es un jugador que me encanta y siempre dejó todo por la camiseta. Hace poco hice un editorial en el que entre otras cosas, decía que el Tractor iba a decidir irse de Independiente como el cuatro de las copas (Sudamericana y Suruga) o un cuatro de copas del truco. Pero la misma razón por la que me enoja que Bustos quiera quedar libre, es la que me lleva a pensar que tiene que jugar. Independiente está por encima de todo y todos, y si los dirigentes lo cuelgan, se ponen a la altura de su capricho.
Si en los próximos seis meses el club tiene a uno de los mejores cuatro del país y no lo utiliza, ¿no se perjudica Independiente acaso? ¿La idea es lastimar a Bustos y pagarle con la misma moneda, que ganan con eso? ¿No sería mejor que el Rojo tenga al menos por seis meses más, jugando a alguien que siempre rindió? Si Independiente está por encima de todo y todos, eso también cuenta para nosotros y nuestro enojo.
Si las dudas pasan por su profesionalismo o lo que pase con los hinchas, la realidad es que siempre se destacó por su actitud dentro de la cancha, por lo que sería ridículo pensar en que no deje todo. Si creo es un fundamento lógico hablar de que de esta manera se taparía a por ejemplo Asís, pero en ese caso podrían alternar, o al menos tener a Bustos como alternativa de ser necesario. Por último, ¿de que manera creen que habría más chances de que recapacite y revea su postura, colgándolo o utilizándolo? Creo que ni hace falta aclarar la respuesta.
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