Mientras se define la posible venta de Felipe Loyola al exterior, Gustavo Quinteros ya apuntó a su reemplazo ideal y es un viejo conocido. Se trata de Vicente Pizarro, mediocampista de 23 años que brilla en Colo Colo y que ya es una fija en las convocatorias de la Selección de Chile.

El "Vicho", hijo del legendario Jaime Pizarro, es una debilidad del entrenador, quien lo dirigió y potenció durante su paso por el Cacique. Zurdo, de gran panorama y buen pase de salida, Pizarro encaja en el perfil de "volante de juego" que busca el cuerpo técnico para darle fútbol a la mitad de la cancha.

Sin embargo, su salida de Chile no es sencilla, ya que su cláusula de rescisión ronda los 3 millones de dólares. Para destrabar la operación sin desembolsar esa cifra, Independiente tiene una carta bajo la manga: Pablo Galdames. El volante chileno del Rojo podría ingresar en la negociación como parte de pago, pasando a Colo Colo en un trueque que beneficiaría a todas las partes.

La llegada de Pizarro está atada a una condición clave: la venta de Loyola. Si se concreta la salida del lateral/volante (Santos de Brasil pica en punta), Independiente acelerará a fondo para darle el gusto a Quinteros y cerrar a uno de los proyectos más interesantes del fútbol trasandino.