El miércoles, cuando escribí que quedábamos en manos de la sabiduría del técnico y de las maniobras que él pudiera realizar en un plantel que a mí entender todavía está incompleto, hablaba de casos como el de ayer. Holan se rebeló, pateó el tablero dejando entrever que contra Atlético Tucumán había cometido ciertos errores, y resignó su orgullo para el bien del equipo, algo no muy frecuente en el fútbol moderno. Con lo poco que tiene, reacomodó las piezas e Independiente volvió a parecerse al del semestre pasado: dominador, intenso y sencillo para jugar.
'Los equipos se arman de atrás hacia adelante', reza una de las máximas de este deporte, y la salida de Amorebieta con la vuelta del tándem Bustos-Franco-Tagliafico-Sánchez Miño fue vital para recobrar la solidez perdida el martes. El exEstudiantes volvió a ser un pilar en ataque y defensa, y el capitán, el león que ordenó la zaga. El buen partido de Meza y de Benítez -quien cuenta con una inmejorable chance para afianzarse tras la salida de Rigoni-, y el peso ofensivo de Leandro Fernández fueron determinantes para sacar los tres puntos. Y sin desmerecer los méritos realizados, no se puede obviar la inferioridad de un Huracán que exhibió lo mucho que le va a costar hacer pie en este torneo.
Apariciones como las de Nicolás Domingo siempre son gustosas. Ayer fue un relojito, manejando los tiempos y cubriendo los espacios del mediocampo. Pese al repudio que generó su llegada por su estrepitoso paso por River, no creo en las casualidades: Holan ya lo conocía y es indudable que proyectó sus virtudes en función de este esquema. Ojalá nos siga regalando de estas gratas sorpresas.
Independiente, también, recuperó ayer la claridad para generar acciones en ataque, pero nuevamente la falta de eficacia le jugó en contra. La casi segura llegada de Leonardo Castro tendrá que combatir contra este problema de hace ya años, pero su imposibilidad de competir por Copa Sudamericana obliga al hincha a renovarle las esperanzas a Leandro, de cara al partido que es una obligación ganar -y para el cual habrá suficiente tiempo de trabajo-. Una corazonada: para el torneo local, me parece que va a andar bastante bien.
Se comenzó con el pie derecho, y el Profe dio muestras de su sabiduría otra vez. No fue necio y, además, con otro audio que se filtró, dejó claras sus pretensiones para con sus dirigidos: el que no corre, no juega (por Zelarayán). Muestras del Independiente que todos queremos ver.
Por
@rffailache