Tras la muy extensa reunión que se llevó a cabo ayer con respecto al tema Pellegrino y Tarzia, hoy se realizó otra. Fue esta mañana en el Predio, con los máximos dirigentes y el entrenador de la institución.

El Presidente Grindetti, junto con Daniel Seoane y Carlos Montaña, charlaron con Julio Vaccari acerca de la situación, sobre todo del defensor. Esto último porque si bien está involucrado Diego Tarzia, su caso no preocupa tanto en la Comisión Directiva.

Si bien es capital del club y es importante que no se desvalorice, no hay que abonar ninguna penalización por él, y podría irse a préstamo a otro club a fin de año, en el caso de que Vaccari no lo quiera más en sus filas.

Lo del defensor es diferente, por los cargos a favor del Milan, y la relación de los dirigentes con su representante.

La primera información que surge de la reunión, habla de la intención de mantener las sanciones de parte del técnico, que hasta el momento se mantiene inflexible en su decisión.

Más allá de lo que opine cada uno, algo difícil de fundamentar al no haber una comunicación por parte del club, es algo lógico teniendo en cuenta lo que se habló acerca del tema.

Repasando lo que declaró Vaccari en conferencia de prensa, queda descartada la vinculación de la sanción con el acontecimiento viral del yate, donde eran muchos los jugadores que participaron. "Yo ya sabía todo eso antes de que se hable. En su día libre pueden hacer lo que les plazca, siempre y cuando después en los entrenamientos hagan lo que uno les pide. A mi no me gusta, les puedo dar alguna recomendación, pero no tengo nada más que hacer", dijo al respecto.

Pero al hablar de las sanciones, fue claro y contundente: "Lo de Diego y Marcos es algo que pone en juego la salud institucional, y cuando eso ocurre, algo se rompe, y hay que tomar decisiones".

Luego agregó: "La decisión de Tarzia y Pellegrino es toda mia. No hay absolutamente nadie que haya participado. El entrenador es el único que está facultado para tomar una decisión con respecto a lo que pasó, que es algo que va a quedar en el vestuario".

La única persona que deslizó una opinión sobre lo acontecido, aparte del escueto pedido de disculpas de parte de los involucrados en redes sociales, fue Santi Hidalgo. el delantero tras el encuentro frente a Unión, dejó clara su postura: "El grupo está unido. Independiente es un club muy grande, que te obliga a ser profesional tanto adentro como fuera del campo".

Los dirigentes tienen razones para tratar de torcer la decisión del técnico, algunas entendibles, pero todas enmarcadas en la grave crisis financiera del club.

El entrenador no quiere quedar expuesto y perder poder como conductor del grupo, algo sumamente lógico.

Veremos si se pueden acercar las partes y arribar a una definición que satisfaga a todos, tratando de evitar que algo se rompa, como dijo el DT.

Por el bien del club, que es lo que está por encima de todos.