tactica falto movilidad
tactica falto movilidad
Táctica: Faltó movilidad
17/08/2014
Por: Mono Rubino
17 de agosto de 2014
La actuación conseguida por el equipo de Jorge Almirón el pasado domingo no pudo repetirse en este partido contra un muy ordenado Estudiantes de La Plata, que si bien no tuvo una gran actuación ofensiva, adaptó su juego para intentar cortar a Independiente en mitad de cancha, y eso, dio sus frutos y se quedó con los tres puntos.
El partido una vez más comenzó con el equipo muy volcado en ataque. Tal como había sucedido contra Atlético de Rafaela, al momento de sacar del medio seis jugadores pasaron rápidamente la línea de la pelota y se pusieron a disposición de un temprano ataque. Y esa fue la tonalidad, durante todo el partido, de un Independiente que siempre acumuló muchas personas en ataque pero le faltó la movilidad y precisión que se necesitan para conectar todas estas partes.
En esta ocasión la táctica elegida por el DT fue 3-5-2, con Figal, Tula y Cuesta en la defensa. Muy cerca de ellos aparecía un impreciso Iván Pérez que pareció ocupar el lugar que había sido de Jesús Mendez el cotejo anterior, y esta vez, el ex central se movió recostado del medio a la derecha junto a Mancuello, que hizo lo propio por el sector izquierdo. Completando el medio campo aparecían el debutante Droopy Gómez de carrilero por derecha y Lucas Villalba por izquierda. En la delantera jugaron Montenegro y Lucero.
La intención del juego prolijo y al ras del suelo siguió siendo la tónica de este equipo. Pero esta vez, no se centró en armar jugadas por el centro sino que la manera de atacar era con toques aparentemente intrascendentes por derecha para generar la distracción en la banda contraria y en ese momento jugar un cambio de frente a la espalda de Jara, que era el lateral derecho de Estudiantes. La movilidad que la había aportado Riaño jugando por todo el frente de ataque no se pudo ver en el Estadio Único y eso se notó, ya que faltaba quien se asociara en corto con Juan Martín Lucero que por momentos pareció muy desconectado del partido, al igual que Rolfi Montenegro a quien costó entenderle en que lugar de la cancha estaba parado (enganche o delantero) y cual era su función. A los 35 minutos, el equipo se veía resentido por la falta de precisión de Iván Pérez y esto generó el ingreso de Francisco Pizzini, quien se paró como de costumbre en la punta izquierda.
Nada sucedió con este cambio, ya que el equipo de Mauricio Pellegrino estaba muy firme con cuatro defensores y cinco jugadores para recuperar en la mitad de la cancha. Los dos volantes centrales del conjunto de La Plata, Gil Romero y Martínez jugaron un gran partido en el apartado de la marca y taparon a todos los creadores de juego de Independiente. Al momento de recuperar la pelota, Estudiantes atacaba con centros, luego de juntar gente en alguna de las dos bandas (así llegó la jugada del gol anulado a Carrillo).
En el segundo tiempo, los platenses atrasaron sus líneas e Independiente nunca le encontró la vuelta táctica en la ofensiva al partido. Siempre se encontraba superado por la marca de los rivales y pocas veces llegaba la ayuda de un compañero a quien se veía entre tres jugadores pinchas. A Montenegro, que se fue retrasando hasta jugar de enganche, le costó entrar en ritmo de juego, aunque así y todo le sirvió para generar dos jugadas, que trajeron algo de peligro al arco de Silva, junto a Mancuello y Pizzini por izquierda. Luego se fue reemplazado por Benitez que ocupó posición cerca de Gómez.
Sin duda, Independiente tiene una gran intención y una muy buena propuesta para llevar a cabo. Evidentemente aún restan cosas por mejorar y muchos movimientos por aceitar. Hoy no pudo imponer su ritmo y su estilo de juego, y por eso se volvió con las manos vacías del Estadio Único, sin patear al arco.