Diego Rodriguez (7): Responsable de mantener la esperanza de al menos empatar el partido. En el segundo tiempo lo exigieron mucho y respondió muy bien. Nada que hacer en el golazo de Licht. Alexis Zárate (3): Flojo partido del lateral. Quizás el peor que le vimos hasta ahora. Se lo vio con muchas dudas a la hora de defender y poco criterio cuando le tocó mostrarse en ofensiva. Los centros desde tres cuartos de campo rival no sirven. Los que lastiman y generan peligro son los que se tiran desde el fondo del campo y hacia atrás para encontrar a los delanteros de frente y a los defensores a contrapié. Debe aprovechar su potencia y animarse a buscar el fondo. Nicolás Figal (3): Nuevamente se mostró con excesiva confianza. Muchas veces le juega en contra, arriesga innecesariamente en lugares de la cancha y momentos del partido en donde no debería hacerlo. No hizo buena dupla por derecha con Zárate y en lo único que estuvieron en sintonía fue en el bajo rendimiento de ambos. Cristian Tula (5): Aceptable partido del central. Ganó algunas de arriba y de abajo en el primer tiempo cubriendo las espaldas de un flojo Figal. No tuvo ningún error de esos que suelen costarnos caro ni jugadas violentas que coquetean con la expulsión. Victor Cuesta (5): Como siempre, el más parejo y el más firme del fondo. Transmite tranquilidad y da garantías. En el segundo tiempo con el equipo jugando mano a mano atrás se lo vio perder como pocas veces. Igual redondeó un aceptable partido. Lucas Villalba (3): Un segundo tiempo para el olvido. Gimnasia se hizo un pic-nic atacando por su lateral. Venía de lograr buenos rendimientos y sorprendiendo pero hoy volvió a mostrar su peor versión. Mal en la marca y sin lucidez para resolver en ofensiva. Jesús Méndez (4.5): Estaba jugando en un gran nivel y esta noche se notó la diferencia. Aportó entrega y algunas buenas combinaciones con el Rolfi pero se lo vio perdido y con poca marca en la mitad de la cancha. El equipo sintió y mucho su bajo rendimiento. Federico Mancuello (4.5): No tuvo un buen rendimiento. Nos tiene mal acostumbrados y tenemos la vara muy alta con él. Aportó el despliegue y la entrega de siempre pero no logró ser claro, preciso y determinante como otras veces. Junto con Méndez no pudieron hacerse dueños de la mitad de la cancha y el equipo por muchos pasajes del encuentro se vio partido en dos y sin tenencia en la mitad del terreno. Daniel Montenegro (6): Unos primeros 15 minutos sobresalientes. Lujos, toques, claridad, todo bien. Lamentablemente el equipo no supo aprovechar el altísimo nivel del Rolfi en esos minutos. Tuvo el gol que hubiera coronado su momento, pero definió mal. En el segundo tiempo no pudo repetir, la pelota no volvió a pasar por él y el cambio de posición tras el ingreso de Pisano lo hizo desaparecer del partido por completo. Una lástima, pintaba para ser su noche. Claudio Riaño (4): Jugó excesivamente de espaldas. Por momentos aguantando bien y pivoteando de manera productiva cuando Gimnasia ejercía presión alta sobre la salida, pero por otros momentos abusando de esejuego y retrocediendo innecesariamente. Quedó de cara al gol y no supo dominar la pelota. Fue la única situación de gol, después se lo vio en lucha permanente contra los centrales y siendo neutralizado por virtud del rival pero también por deficiencias propias y del equipo en ofensiva. Juan Martín Lucero (3): Al igual que Riaño, jugó demasiado de espaldas al arco. En su caso, le cuesta aguantar y pivotear de buena manera. De hecho muchas veces eso se paga con una jugada de contra del rival. Pasó hoy y pasó también en otros partidos (Tigre, por ejemplo). Por momentos su estilo displicente y poco involucrado exacerba. Cuando no le salen las cosas y no aporta su cuota goleadora debería aportar desde la entrega por lo menos. Hoy no lo hizo. Matías Pisano (4): Entró en el peor momento del partido con la responsabilidad de cambiarle la cara a un equipo que estaba jugando mal y era superado. Tuvo un buen arranque con gambetas y un tiro de media distancia pero después no supo asumir el rol de conductor ni juntarse con el Rolfi para generar juego. Debió haber jugado de entrada tras la lesión de Pizzini. Sebastián Penco (4): Entró para ganar el partido en la zona del “como sea” pero no tuvo la fortuna de otras veces. El equipo no supo buscarlo tampoco. Martín Benítez: Pasó desapercibido los poco más de 10 minutos que le tocó jugar. Prácticamente no tocó la pelota. Jorge Almirón: Personalmente me parece que se equivocó en la lectura previa que hizo del partido. Contra Gimnasia, de local y para buscar pelear el torneo, debió haber planteado un esquema como el que planteó contra Tigre. Con más gente arriba y no tanta atrás. Aún así, el equipo y los jugadores clave no tuvieron una buena noche y eso se siente con cualquier sistema. El equipo no generó una sola situación de gol ante un pobre Gimnasia y tampoco supo leer y cambiar a tiempo cuando se veía que la cosa venía mal.