Más allá de la duda por saber quién será el reemplazante de Víctor Cuesta como segundo marcador central, encontrar un cinco de peso que pueda ocupar el lugar que dejó vacante el lesionado Torito Rodríguez es otra de las mayores preocupaciones de Almirón. Y no es para menos. El rendimiento de Bellocq en el día de ayer no hace más que acrecentar esa falta. Méndez es un jugador con altibajos y que no tiene la marca del Uruguayo, además el bajo nivel de Graciani por derecha cada vez que entra no ayuda a la hora de buscar equilibrio en el mediocampo. Y probar con un juvenil (Julián Vitale) de cara a dos clásicos tan importantes no parece ser lo más aconsejable. Esta mañana el entrenador probó con Aguilera de número cinco, un probable indicio de una alternativa a este problema. El Mendocino a pesar de ser marcador central conoce esa posición y jugó en la misma en Defensa y Justicia y Godoy Cruz. Puede que haya hecho este movimiento para verlos a Figal y Breitenbruch jugando de centrales, pero no habría que descartar ver al exTomba jugando de cinco. Para entrar por Cuesta, además de los ya mencionados aparece como opción Cristian Tula, que se está recuperando de su desgarro y según el resultado de los estudios que le harán esta tarde, podría a partir de mañana entrenar con normalidad.